La otra mitad es de poliéster reciclado, haciendo que la totalidad de la segunda camiseta esté producido con todos los residuos que tanto dañan al planeta. Inauguró su colección en 1993 con una camiseta del Real Madrid que le costó 10.000 pesetas, unos 60 euros (localizamos una igual, aunque algo deteriorada, en Wallapop, al precio de 199 euros) y acopia joyas como una elástica de portero de la marca Adidas, genérica (sin escudo), de los años ochenta, la cual, “si la pusiera en venta, mínimo 400 euros podía sacar”.