Las comidas más famosas de Cork son los crubeens (patas de cerdo hervidas) y drisheen (una especie de morcilla), que por lo general se sirve con tripas. Festejado a principios del siglo XIX, y denominado «whipping the herring» (azotando al arenque), este rito consistía en un paseo por las calles hasta el río Lee de un carnicero local que azotaba un arenque con un látigo, seguido por los ciudadanos.