Pelé, que era uno de los rivales, estaba lesionado y no jugó los partidos. Era la cabeza visible de un grupo de empresarios, entre los que se encontraban viejos conocidos como el que fuera preparador físico del Real Burgos Carlos Lorenzana o el también exfutbolista del Real Burgos e hijo del presidente Domingo Novoa. Independiente le ganó los dos partidos, primero por 3-2 en Brasil y luego 2-1 como local.