Lejos han quedado los modelos antiguos y en colores planos que apenas se diferenciaban unos de otros. En ese momento, una jugadora que había demostrado que sería importante para el vestuario cogió las riendas del grupo, aunque no lo hizo desde la titularidad, sino como revulsivo desde el banquillo. Aunque no seas seguidor de este deporte ni de un equipo en concreto, puedes empezar a vestir con la equipación simplemente porque te gusta su diseño.