1. Te aseguras de que la calidad del producto es buena (lo han comprobado muchos compradores antes que tú). Sabemos lo mucho que se extrañan aquellos años 80 y 90, sobre todo las jugadas de los grandes del baloncesto anteriormente mencionados. Por lo general, nunca encontraremos un defecto lo suficientemente notable como para que pensemos “me han estafado”. Contamos con la ventaja de que nuestro stock está actualizado en tiempo real.